Piscina de Bethesda

La Piscina de Bethesda se menciona en la Biblia como un lugar donde la gente venía a lavarse en las aguas curativas y como el sitio donde Jesús curó a un hombre paralizado. Hoy en día, la piscina excavada se encuentra en el barrio Musulmán de la Ciudad Vieja de Jerusalén, a unos 50 metros dentro de la Puerta de los Leones (conocida en la era Bíblica como Puerta de las Ovejas, ya que las ovejas serían llevadas a la ciudad a través de esta puerta para el sacrificio en el Templo) . La piscina están dentro de un complejo junto con la Iglesia de Santa Ana que marca la casa de los padres de María, Joaquin y Ana.

La piscina se excavó originalmente a fines del siglo XIX, pero el trabajo en el sitio ha continuado durante por más de 100 años. La excavación del sitio reveló que la piscina estaba dividida por una pared o presa, creando dos cuencas separadas. Un tramo de escalones que conducen a una de las cuencas de la piscina indica que podría haber sido un baño ritual Judío (mikvá). La segunda cuenca se habría utilizado para recolectar y retener el agua de lluvia para mantener a la mikveh constantemente abastecida con agua fresca. En la Biblia, la piscina se describe con cinco pórticos, esto sugeriría una piscina de cinco lados.

La Piscina de Bethesda en la Biblia

La Biblia nos dice cómo la Piscina de Bethesda fue visitada por sus poderes curativos. La primera persona en entrar al agua fue curada de su dolencia. En Juan leemos cómo un paralítico había estado llegando a la piscina durante los últimos 38 años, pero nunca tuvo la oportunidad de ser el primero en el agua. Jesús visitó el estanque y le dijo al hombre que "tome su camilla y camine".

Historia de la Piscina de Bethesda

Durante la vida de Jesús, la piscina podría haber sido un baño ritual Judío (mikvá). Durante la era Romana, se construyeron baños medicinales en el sitio de la piscina, lo que sugiere que se creía que las aguas tenían poderes curativos, como está escrito en la Biblia. En los siglos siguientes, los Bizantinos y los Cruzados construyeron iglesias y capillas en el sitio y aún se pueden ver restos de estas estructuras.